Cuando decidimos dar el salto a la fotografía réflex hay multitud de cuestiones que debemos resolver. La marca de la cámara, el modelo, los objetivos, el flash... Hay que valorar lo necesario de cada uno de estos accesorios propios de la cámara como tal, pero también tenemos que contar desde el primer día con un medio de transporte para todo esto que sea cómodo y seguro.
Entre la infinidad de posibilidades existentes en el mercado, una que viene muy bien recomendada es la bolsa para cámara Billingham Hadley. Fabricada en un tejido llamado FiberNyte, de gran resistencia e impermeabilidad, tiene acabados en cuero y todos los compartimentos necesarios para guardar y ordenar los accesorios de nuestra cámara.
En su interior cabe hasta una Nikon D7000 con objetivo de 50 mm acoplado y otros dos objetivos a mayores. Además de su buena capacidad, hay que destacar que su diseño clásico, incluso algo vintage, es sencillo y discreto, con un toque clásico. Su precio es de 150 euros más gastos de envío, una inversión quizá algo elevada, pero que agradeceremos a largo plazo.